viernes, 31 de julio de 2009

El absurdo

De la sección de opinión de El País de hoy:

¿Qué mentalidad puede tener alguien que decide entrar en ETA? Si la organización tuviese sólo unos días de historia podría albergar ilusiones respecto a su cometido, sus estrategias o sus opciones de victoria. Pero ETA lleva medio siglo de andadura. En este tiempo, más allá de sus planteamientos políticos antidemocráticos, la organización se ha dedicado básicamente a destrozar familias: huérfanos, viudas, mutilados, edificios destrozados... personas heridas para toda la vida. Hoy más que nunca todos tenemos claro que ETA es, en lo esencial, una organización criminal. Nos lo dice su insistencia en el delito, a pesar del poco éxito cosechado respecto al objetivo final. Por eso veo en su testarudez ciertos rasgos de objetiva estupidez. Unos 800 presos dan fe de lo que espera a quienes entran en ETA.

Algunos, después de desperdiciar 10 o 15 años de su vida en la cárcel, han salido ya para comprobar que están a la misma distancia de su objetivo que cuando entraron en ella. Y a pesar de esta evidencia demoledora, siguen apareciendo jóvenes cuya conciencia no se opone a hacerle daño a otra persona, a mutilarla o a matarla. A conseguir que pase miedo.

Sabe que tendrá que matar o ayudar a otros a matar. Sabe que la única opción de que el País Vasco sea independiente pasa por el riguroso respeto a las mismas leyes que ellos desprecian. Y sabe que irá a la cárcel.

Puede incluso que lea esta carta, y cuando finalmente llegue a la cárcel se acuerde de ella. Que sepa entonces que no está allí por obligación, ni siquiera por opción. Está allí por estúpido, y porque de entre los cientos de vidas posibles eligió hacer daño a otros, no importa por qué motivo.- Pablo González Caballero. Madrid.


Link.

martes, 14 de julio de 2009

Racatacatá... RETROSPECTER!!

Porque ya iba siendo hora de dedicarle una entradica a estas obras cumbres del absurdo.




Dedicado a vosotros, frikazos, con los que tantas conversaciones he tenido basadas únicamente en la repetición sin sentido de las mamarrachadas aquí contenidas. Hostiafina!

domingo, 12 de julio de 2009

Ladrón, que robas con amor

Hoy dice la prensa que Luis Roldán saldrá de la cárcel sin haber devuelto el dinero que trincó. Casi quince añazos ha echado el tío en una celda desde que le pillaran en Laos, tras haberse convertido en el prófugo más famoso de España. Quince años que se dicen pronto, pero son largos y duros cuando se trata de perder la libertad por tres lustros que ya no se podrán recuperar. No me parecen ni muchos ni pocos -serán los que tengan que ser- pero no termino de aceptar lo de que un tipo que mangó una bonita cantidad de millones de euros pueda salir a la calle y decirse libre como alguien que ha saldado sus cuentas con la Justicia. No, mientras sigue guardando bajo algún ladrillo, colchón o paraíso fiscal el dinero que en su momento le valió la condena.

Vaya por delante mi absoluto respeto por la difícil labor de aquellos que tienen la responsabilidad de legislar o juzgar -no quisiera verme yo en sus zapatos- pero como ciudadano mi opinión es que aquel que roba no deja de robar hasta que devuelve lo robado. Por eso, Luis Roldán no debería estar terminando hoy su condena, sino comenzándola de nuevo. Hoy, y otra vez mañana. Y la próxima semana. Cada día.

sábado, 4 de julio de 2009

Felicidades Carol!



Estos ositos han sido programados para publicarse automáticamente a eso de las 6 de la tarde del 4 de julio de 2009. Se publican ellos solitos porque yo no estaré para darle al botón, y ello se debe a que ese día, justo a esa hora, estaré con nuestra doctora Carol y con Cyril, su gabacho favorito, que estarán a su vez diciendo las palabras mágicas y poníendose los anillos. Así, querido lector, si estás leyendo estas líneas es porque Carol y Cyril se nos han casado ya. Felicidades, reguapos!

viernes, 3 de julio de 2009

A sus pies, don Follonero!

Mi exilio holandés me había privado de esta joyita que acabo de descubrir en Internet:











Qué opináis? A mí me ha parecido grandioso!